Los detalles.
“Sin entrar en detalles, bien” dice un amigo, en un esfuerzo de optimismo, cuando se le saluda con la rutinaria pregunta sobre el estado de las cosas. Podría co...
Autor: Nohemí Gómez-Pimpollo Morales
Pasatiempo.
Otra vez Mario, Cuando éramos niños los viejos tenían como treinta, un charco era un océano, la muerte lisa y llana no existía. Luego, cuando muchachos, los vi...
Cuando sonríes, …
Para tí, por el esfuerzo de poner una sonrisa, en medio de tu amargura. When you are smiling ocurre que tu sonrisa es la sobreviviente, la estela que en ti dejo...
Ausencia.
Habré de levantar la vasta vida que aún ahora es tu espejo: cada mañana habré de reconstruirla. Desde que te alejaste, cuántos lugares se han tornado vanos y si...
De cómo decir una cosa y la contraria.
Suena, en una emisora de radio a través de mi televisor, una vieja copla “… lo que me dicen tus ojos, me lo desmiente tu boca…”. La tarareo. No me acabo de ent...
Poema 20.
Puedo escribir los versos más tristes esta noche. Escribir, por ejemplo: «La noche está estrellada, y tiritan, azules, los astros, a lo lejos.» El viento de la ...
Nana del niño ausente.
Dentro de la casa, la cuna dorada que albergó mis sueños, conserva tu almohada. La cuna dorada acoge en la noche tus sueños, y al alba, alberga fantasmas. Acoge...
Apagón.
Necesita encontrar el biberón. Sabe que siempre lo deja en la cocina, normalmente al lado del microondas, pero aunque mueve la mano de arriba abajo continuament...
Siete pimpollos.
Un poema que mi padre regaló a mi madre el día de su cumpleaños, y ambos nos regalaron a todos los demás con el orgullo de ser sus hijos. Siete pimpollos tengo ...